Moto-problemas, necesidad incómoda

Por Víctor Hugo Ornelas

Vehículos que carecen de medidas de seguridad y muchas veces son
conducidos por menores de edad, mototaxis en Tlajomulco

El número de mototaxis existentes en el municipio, rebasa por mucho a los permisos emitidos por la secretaría de vialidad, es decir que más del 50% de las motos que operan son irregulares, llamados “piratas”.

Circulan sobre avenidas, vías rápidas, incluso por la carretera y delegaciones, lo que supuestamente tienen prohibido, porque su circulación se debería limitar en los fraccionamientos autorizados (Santa Fe y Chulavista). Muchos de los conductores no cuentan con licencia de manejo, otros son menores de edad, por lo que no pueden brindar a sus pasajeros la seguridad y confianza de estar capacitados para operar este medio de transporte.

En los accidentes en que participan, la imprudencia es uno de los principales motivos por los cuales ocurren, además de ello, lo que una persona menos desea es tener un percance con algún mototaxi, porque cuando eso sucede sólo es cuestión de minutos para que al lugar acudan mototaxistas por decena, quienes terminan intimidando al conductor del automotor implicado.

Otros simplemente pueden ser parte de un accidente y alejarse sin mayor problema. Así ocurrió con un motociclista que fue golpeado por un mototaxi el lunes 16 quien nos comentó:

“Yo iba por mi carril y se me metió, me rompió el espejo y casi me tira, pero ni se paró, al contrario, le dio más rápido y el conductor del mototaxi era menor de edad”

La situación de las motos irregulares afecta considerablemente a todos aquellos que pertenecen a este gremio pero de manera legal; por su parte, las personas poco a poco han perdido la confianza en este medio de transporte, incluso ahora manifiestan una clara oposición a los mototaxis, que en su momento consideraban una necesidad.

Las normas que deben seguir estas unidades son violadas diariamente una y otra vez, la aportación voluntaria desapareció para algunos y ahora cobran incluso más caro que un camión urbano, al respecto una vecina comentó:

“Le di 5 pesos y me dijo que para la otra mejor no me subiera si no tenía dinero, que mínimo tenía que darles 10 pesos”

Otra señora nos comentó:

“Un mototaxi me quería cobrar 90 pesos por llevarme de Santa Fe a San Sebas, mejor me bajé y tomé un taxi y nomás me cobró 60”

Casos como estos se repiten día a día, en donde ofrecen el servicio en la carretera,  lo cual está prohibido, y se olvidaron de la “cuota voluntaria”, estableciendo sus propias tarifas, las cuales fijan no en base al servicio prestado, sino de las necesidades del operador del mototaxi, siendo usual que hasta ofendidos se sientan cuando se niegan a pagarles lo que ellos quieren.