En Tlajomulco nada parece detener
la proliferación de máquinas de azar, quienes se dedican a este negocio no se
intimidan ante las acciones que realiza el Municipio, pues luego del operativo
de decomiso y destrucción de máquinas que realizó el Gobierno Municipa, a
inicios del mes de febrero, las tiendas volvieron a exhibir tragamonedas sin
repercusión alguna.
Pero no sólo eso, el mensaje que
dan estos distribuidores de máquinas electrónicas es de reto a la autoridad
municipal, misma que cabe señalar, debido a su ineficacia para detener su
operación, ha resultado señalada como una de las coludidas en el incremento de
estos aparatos en el Municipio.
En días pasados, logramos captar
las nuevas máquinas que operan en las tiendas de abarrotes, además de un vehículo
particular que se presume, pertenece a uno de los grupos distribuidores de
estas tragamonedas.
La camioneta tipo pick-up en
color rojo, transportaba varios equipos que fueron repartidos en diferentes
tiendas del fraccionamiento Santa Fe, los locatarios aseguraron que quienes las
estaban repartiendo, mencionaron que no existía problema con el Gobierno
Municipal, pues serían previamente advertidos sobre cualquier operativo y lo
único que deberían hacer era meter la máquina donde no se viera y al día siguiente
de los decomisos, podrían exhibirla de nueva cuenta.
Por si fuera poco, hay indicios
de que las que operan en Tlajomulco son fabricadas dentro del territorio
municipal, esto en una localidad denominada El Campanario de la Agencia
Tulipanes.
Aunado a lo anterior, Tlajomulco
enfrenta un nuevo problema, pues en los últimos días, la Dirección de
Inspección y Reglamentos ha identificado que un grupo de personas presuntamente
ajenas al Gobierno Municipal, se hacen pasar por empleados del Ayuntamiento y
acuden a las tiendas para llevar a cabo decomisos de máquinas, que
posteriormente instalan y controlan en otros puntos del Municipio.
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