Así ve Enrique Alfaro a Tlajomulco de Zúñiga.

Por : Yoanis Hernández.

Gran preocupación tiene Enrique Alfaro y su equipo de trabajo, porque ellos tenían una idea de cómo se encontraba Tlajomulco de Zúñiga, pero lo que no tenían tan claro era como estaba el gobierno de Antonio Tatengo Ureña.

Comentó el presidente municipal que el proceso de entrega-recepción no siguió el curso legal y fue obstruido por el gobierno saliente, lo cual impidió tener un contacto directo y un diagnóstico preciso a lo que se enfrentaría. Al tener la entrada a las oficinas encontraron un escenario terrible y desastre administrativo, condiciones lamentables en términos de recursos humanos e instalaciones físicas. Muchos de sus regidores están sin oficinas, dependencias enteras que están atendiendo a los pobladores en las banquetas y la presidencia municipal no tiene comunicación telefónica.

Uno de los programas que ya inició esta nueva administración es la limpieza de Tlajomulco en todas las aristas imaginables que afectan a la ciudad. A tales efectos ya se creo la comisión de “Espacios públicos” y con acciones radicales, las cuales tienen que ver con la transformación de la imagen urbana.

La primera tarea durará quince días y gira en torno a la publicidad, quienes apoyados en el artículo 345 del código urbano, retirarán cerca de 50 mil anuncios publicitarios que invaden nuestra imagen visual y que se ven por doquier en postes, bancas, árboles, cestos de basuras y similares. Los espectaculares es un tema un tan complicado por la cantidad que existen en todo el municipio, aunque Tlajomulco no es de los más afectados, la zona metropolitana de Guadalajara nos supera.

Enrique Alfaro anunció además que toda la materia prima recolectada con el retiro de los anuncios publicitarios se reciclara para la fabricación de bancas, cestos y otros. Alfaro aclaró que no tiene ningún compromiso con las empresas en cuanto a la publicidad ya que algunas tienen un permiso; y aclaró que para las reclamaciones él tendrá elementos para proceder y recalcó que con respecto a los espectaculares no habrá negociaciones por que su administración no negociará con la ley.

El presidente municipal dijo además que este es un proyecto general e incluye las principales poblaciones pero ya se ven los resultados en la carretera a Chapala y avenida López Mateos desde El Palomar hasta el kilómetro 40.

Una de las dificultades más graves encontradas por la actual administración está relacionada con los contratos laborales. En el ayuntamiento de Tlajomulco el 90 ciento de los contratos de los trabajadores de confianza no están firmados por las autoridades municipales. Algunos de estos documentos solo presentan las firmas del personal interesado y carecen de todas las otras, quedando al efecto sin ninguna valides legal. En muchos de los tantos casos de ilegalidades están, “contratos por tiempo determinado que en menos de tres meses pasaron a ser fijos”.

En una plática con “La Verdad”, Enrique Alfaro señaló además que este primero de enero llegó a un gobierno que se parece a Tlajomulco de los Aguaros, como en el filme la Ley de Herodes, y no De Zúñiga como él lo esperaba, pues al igual que el film la ley fue utilizada de adorno.

Ante tantas irregularidades una pregunta es oportuna a Enrique Alfaro: ¿Sería revanchismo de Tatengo o pura ignorancia por generar este caos?.

Muy claro, como es siempre en sus declaraciones respondió “Sólo fue simple ignorancia de Antonio Tatengo y consecuencia de tres años de desgobierno, además de muchos años de irresponsabilidad por anteriores administraciones en Tlajomulco, un municipio plagado por gobiernos corruptos e ineficientes”.

La situación financiera comentó que no es de las peores, “Aquí los problemas están enfocados principalmente a la dependencia de obras públicas, donde muchas de las obras asignadas no tienen contratos, otras han sido otorgadas sin licitar, además de diversos compromisos con proveedoras y constructoras. Alfaro agregó “Si algunas de estas empresas se prestó a asuntos turbios, que se olviden de sus pagos”.

Aunque el presidente municipal refleja que en términos financieros no está el diagnóstico exacto de la situación del municipio, sí se tiene el administrativo, donde muchas de las cosas tomarán un camino con la mayor transparencia posible. Aclamó además que espera que el Congreso no haga lavado de cuentas públicas y se juzgue al presidente saliente por los 200 millones de pesos que ya están fincados con los cargos por la auditoría superior del 2008 y agregó que si estos cargos se formalizan pronto se podrán aplicar los créditos fiscales para que Antonio Tatengo regrese lo que no está en las cuentas del municipio.

Sentenció “El que esté esperando pruebas las va a tener y pronto saldrán a la luz pública las condiciones financieras en que se recibió a Tlajomulco de Zúñiga”.

Estas son muestras de los retos titánicos a que se enfrenta la administración de Tlajomulco, por lo que la población debe comprender que el cambio sí va, pero no puede ser repentino.