Estacionamientos y comercios operan sin licencia ni permiso |
Las deficiencias y falta de
planeación, al momento de llevar a cabo una obra en Tlajomulco es evidente en
cada intervención del gobierno, prueba palpable de ello es el nuevo hospital
regional del IMSS, nosocomio que es presumido a nivel federal por su
modernidad, sin embargo, en los alrededores de este, reina el caos.
Por Víctor Hugo Ornelas
De esto se ha derivado la necesidad y
a la vez la oportunidad, la primera para las personas que requieren un lugar para dejar su auto, la
segunda para los que cuentan con un predio a los alrededores del nosocomio y
los han habilitado como estacionamientos públicos cobrando tarifas, en
promedio, de cinco pesos por hora.
De igual manera ocurre con los
negocios de comida que han invadido uno de los costados de la carretera y que
siguen haciéndolo después de varios operativos implementados por la dirección
de comercio y festividades, que desde hace mucho tiempo ha mostrado
irregularidad a la hora de llevar a cabo su labor, sólo durante la visita de
Felipe Calderón, presidente de la República, y anteriormente, por la petición
del gobierno del Estado, lograron controlar la situación, pero al cabo de unos
días, de ambas situaciones, parecen haberse desentendido del problema.
Menos oportunidad para quienes menos tienen
A los comercios que se han establecido
en el lugar, incluso desde que inició la construcción del hospital, se les ha
negado el permiso para operar. Los comerciantes ambulantes no reúnen los
requisitos necesarios para poder regularizarse y obtener el visto bueno de las
autoridades municipales, lo que a su vez, ocasiona que se generen actos de
corrupción, donde en ocasiones el comerciante intenta sobornar o lograr
acuerdos con el fin de que se le permita trabajar.
Esta situación deja en claro que es
necesario implementar medidas o reglamentos, mediante los cuales se les pueda
brindar algún tipo de apoyo o facilidades, principalmente a todos aquellos que
no cuentan con un negocio establecido ni un lugar para adaptar alguno, porque
de la manera en que se regulan actualmente, se siguen viendo favorecidos con
mejores oportunidades, sólo quienes cuentan con una propiedad o más recursos,
mientras que aquellos que sobreviven con su venta del día, se convierten en los
más señalados y perseguidos, por quienes se encargan de regular los giros
comerciales.
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