martes, 21 de mayo de 2013

Estafan en centros comerciales


“Es la olla exprés más cara que he comprado”, mencionó Carlos mientras miraba la caja que contenía aquel artículo de cocina por el cual pagó 3 mil 500 pesos.

Aunque pagar no es la palabra correcta para referirse al dinero que dio a cambio de la vasija de acero inoxidable, “me estafaron pues”, concluyó en ese momento en tono de resignación el vecino del fraccionamiento La Arbolada.

El presunto fraude tuvo lugar en el centro comercial Multi Plazas del Valle, Carlos salía hacia el estacionamiento luego de haber comprado limones y poner recarga a su celular, cuando lo abordó una mujer que le invitó a participar en una promoción a la que se hizo acreedor por las compras realizadas.
Por Víctor Hugo Ornelas


Al igual que decenas de clientes del centro comercial, Carlos acudió a una carpa habilitada en el estacionamiento para hacer válido el “tiro gratis” con el que le prometieron podría “ganar premios” como reproductores, pantallas planas, centros de entretenimiento y otros.

Carlos comenzó a jugar, el primer tiro fue gratis como se lo prometieron, el segundo le costó 50 pesos, de ahí en adelante comenzó a vaciar su cartera con la promesa de más premios y mayor posibilidad de ganarlos, hasta que cayó en cuenta de haber gastado ya 3 mil 500 pesos.

Entre la impotencia y la duda, el participante aceptó la olla como premio de consolación y regresó a su casa sin la menor idea de  a quién acudir para hacer la denuncia, “Ni siquiera sabía si eso era legal, pensé que no, pero también me puse a ver que estaba en una plaza y no creí que se prestará para ese tipo de fraudes”.

¿Cómo operan?
De acuerdo a investigaciones de este semanario, esta especie de negocios opera principalmente en los estacionamientos de centros comerciales, la cantidad de personas que laboran en el mismo dependerá de la magnitud de la carpa que habilitan.

En el caso de Multi Plazas del Valle, lugar al que acudió Carlos, operan alrededor de  12 personas, unas de ellas dispersas en los accesos del centro comercial, su labor es abordar a los clientes del centro y acercarlos a la carpa de juego.

Ahí hay otro grupo de gente, son los que explican el mecanismo del juego y se encargan de hacer creer al jugador que es posible ganar, sin embargo, la realidad es otra.

La meta del juego es lograr cien puntos para poder acceder a una pantalla plana, el participante recibe seis canicas que lanza sobre una tabla con múltiples perforaciones y números previamente marcados en cada una de estas, la suma de los números en que cae cada canica al azar, será el puntaje del jugador.

El primer tiro es gratis, la máxima puntuación no supera los cincuenta puntos si tomamos en cuenta la suma de los dígitos más altos, es ahí cuando comienza el fraude.

El segundo tiro tiene un costo de 50 pesos, pero las reglas también son modificadas, ahora hay números neutros y positivos, es decir, los números de determinado color sumarán y los demás no aportarán nada, el tercer tiro también sube de pecio, al igual que el cuarto y así sucesivamente hasta llegar a tiros de 500, mil o dos mil pesos que son jugados y pagados ante la aparente posibilidad de ganar.

El truco se encuentra en las combinaciones, de acuerdo a los colores y los números, ninguna combinación de tiros cuyo monto sea mayor a diez y menor a 40 pueden sumar, esto indica que para lograr los cien puntos, sería necesario lograr once tiros consecutivos de nueve puntos o tres consecutivos de más de 40, los cuales, cabe señalar, representan una probabilidad matemática muy reducida frente a la cantidad de combinaciones probables.

Operan sin permiso y fuera de ley
De acuerdo a la Oficialía Mayor de Padrón y Licencias, estos negocios operan sin un permiso municipal, además, Bonifacio Ramírez, titular de la dependencia explicó que por la naturaleza del giro, el permiso sería negado.

Pero no sólo se quebrantan las normas del Municipio, además, quienes ejercen esta actividad violan la Ley Federal de Juegos y Sorteos y el Código Penal Federal en su artículo 386, que determina como delito de fraude “el que engañando a uno o aprovechándose del error en que éste se halla, se hace ilícitamente de alguna cosa o alcanza un lucro indebido”.

Para frenar la proliferación y operación de estos negocios, el Ayuntamiento llevará a cabo un apercibimiento a los centros comerciales para advertir de las posibles sanciones como multa y hasta clausura, a aquellos que permitan la operación de giros como el ya mencionado.

Es importante que si es, o fue víctima de alguno de estos negocios, presente la denuncia correspondiente a las autoridades, en este caso al Ministerio Público.

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