Las máquinas de azar, lejos de desaparecer se multiplican |
Ante la presunta red de corrupción que opera en
lo referente a las máquinas de juegos de azar, para evitar que funcionarios del ayuntamiento las
retiren de sus locales y sean multados, habitantes de San Agustín que cuentan
con este tipo de aparatos, optan por sacarlos, encenderlos, destaparlos por la tarde- noche, cuando –aseguran ellos-
no hay riesgo de que venga autoridad alguna.
Propietarios de pequeños comercios las sacan de
la trastienda, otros les quitan la tela y mercancía que las cubren y hay uno,
que incluso la tiene en la cochera de su casa para que a través de los
barrotes, las personas puedan meter la
mano, depositar y jugar.
Las máquinas
tragamonedas o de azar reaparecieron en San Agustín, presuntamente
protegidas por algunos funcionarios del gobierno municipal, denuncian padres de
familia, quienes lamentan que, en muchos casos, sean señoras las que acuden a
esta práctica de juegos, y luego protestan porque sus hijos, “Quieren estar
metidos todo el día en las maquinitas”.
Por Jorge López
Prohibidas
por la ley
Estas máquinas de azar se observan en todo tipo
de negocios establecidos, pese a estar prohibidas por la Ley Federal de Juegos
y Sorteos desde 1947; sólo la secretaría de gobernación puede autorizar y
vigilar los sitios donde operan.
Al cuestionarle a los propietarios de negocios
si tienen conocimiento de que estas máquinas están prohibidas, que las
autoridades se las pueden quitar y aplicarles una sanción económica, la
respuesta fue con sorna, “A poco se van a quedar sin su chivo, vienen
puntualmente cada quincena, nos ponemos la del Puebla y no hay problema”.
“Ellos saben cuantas maquinitas hay y quién las
tiene, entonces cómo va a venir por ellas, vienen pero no por ellas, sino por
su mochada”; “Ya se van (fin de la administración) y tienen que irse cargados,
pues algunos se quedarán sin chamba”, aseguran.
“Hay muchas señoras que vienen a jugar, no sé
si por la situación, pero cuando ganan dicen que ya sacaron lo del chivo”; “Hay quienes permanecen jugando casi una hora
y no hay poder que las retire”; “Vienen, juegan, se van y luego cuando sus
niños vienen a jugar vienen por ellos y se los llevan a golpes”, son las
declaraciones de algunos propietarios de negocios.
Aseguran
unas cuantas
El ayuntamiento retiró, el pasado fin de semana
23 máquinas de azar, en diversos puntos del Municipio como Chulavista, Santa
Fe, Eucaliptos, Agaves, El Zapote, Alameda, entre otros. La sanción económica a
la que se hacen acreedores quienes tienen este tipo de tragamonedas, puede ser
hasta de doce mil pesos.
Además estas máquinas causan adicción, lo que
puede convertirse en un lastre para la vida de las personas. Ahora, en
vacaciones, ante la falta de espacios públicos, áreas verdes y sitios de sano
esparcimiento para jóvenes y niños, las maquinitas se convierten en foco de
atención para ellos, ante la indiferencia o contubernio de las autoridades
municipales.
¿Mafias?
Finalmente, Abelardo Caro, encargado de la
dirección de inspección y reglamentos expresó su malestar porque muchas de las
máquinas que retiran de diversos establecimientos y son entregadas a la PGR,
“reaparecen”, sin explicación, en diferentes puntos del Municipio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario